Mi primer semestre como Diseñadora de Modas

Me parece increíble que después de tres años desde que empecé este blog, esté ahora hablando de que cambié de carrera y ahora me dedique a la creación y diseño de prendas.

Recién corté el talle del vestido temático.
Me maravilla pensar en lo que depara el futuro, ya que allá en ciencias no sentía nada, estaba vacía por dentro y se me notaba al carecer de interés por mejorar. Sin embargo, ahora me siento llena de energía, aunque no puedo negar que sigo sintiéndome un poco atorada.

Ahora me encuentro en una escuela particular (cuyo nombre no mencionaré porque es de verdad pequeña) que se dedica a eso solamente. Pensaba que entraría a primer semestre como todos, pero las profesoras, al ver que tengo un conocimiento más avanzado, decidieron cambiarme a segundo semestre. 

En este, el temario constó en crear una prenda temática del 16 de septiembre, una bata de descanso y finalmente prendas deportivas (playera, bermuda, chamarra y pantalón) con la optativa de crear un vestido de maternidad. Todo fue muy bien.

Empecé el semestre creando mis propios patrones (talle, falda y manga) y hacer las pruebas con manta, sin embargo, a las x semanas de haber estado haciéndolo, nos comentaron que la prenda temática ya debía llevarse a cabo.

Mi vestido se basó en la mezcla de culturas. Creé un vestido blanco de chiffon forrado de rayón con escote en V-añadí olanes al mismo-a la cintura, con corte estilo princesa a mitad de la sisa, mangas aglobadas con olanes en los puños y la falda fruncida que llegaba hasta el piso. 

¡Fui una vergüenza! No sé modelar, no sé posar, soy embarazosa y mi cuerpo no da para modelar.

En fin, después de la terrible primer pasarela, vino el sismo y todo se descontroló. 

Dulce pijama.
No me convenció la tela.
Fueron dos semanas (si bien recuerdo) de clases perdidas. Sin embargo con una profesora logramos avanzar y así, terminamos la bata de descanso (yo hice una pijama, nada más).

Continuamos entonces haciendo la playera deportiva, a la cual le añadí un bolsillo con un bordado del logo de mi tienda. Nada especial.

Entonces proseguí a hacer el patrón del pantalón y a hacer la prueba. Por añadir, es la primera vez en años que hago un pantalón. Tuve errores que felizmente corregí después de probarla con la manta y así, proseguí a realizar la transformación.

¡Pero no crean que lo hice todo a la ahí-se-va! En dibujo, nos pusieron a hacer diseños (así, nada más). Lamentablemente, estos no tienen una inspiración ni tema como tal. Pero espero que para el próximo semestre todo tenga una dirección.

Después de haber realizado mi bermuda, proseguí a hacer la chamarra deportiva.

Sinceramente la ropa deportiva no es lo mío, así que para encontrar una tela que satisficiera fue complicado y me vi en la necesidad de usar una tela que ya tenía a la mano. 

Primeros bosquejos
Seguí entonces a hacer el pantalón deportivo, el cual me salió muy enorme y grueso, pues usé la tela incorrecta. Pero de los errores aprende uno.

Asimismo terminé el programa y me dediqué a hacer el vestido de maternidad. 

Este fue más sencillo y lo realicé en un santiamén. 

Finalmente terminamos el temario de trazo y corte y confección, por lo que me faltan los de dibujo y bordado, pero en eso estoy.

Realmente siento satisfacción de estar aquí y a la vez siento prisa por acabar lo más pronto posible. Necesito trabajar más duro para poder lograr la meta máxima.

Quiero creer que este 2018 estará lleno de ganancias. Quiero creer que este 2018 será ameno.

La cosa es no rendirse y trabajar duro.

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